Estudió en la UFV en la promoción de 2001 y desde entonces ha continuado imparable por la senda del periodismo que le llevó desde Somos Radio mientras estudiaba hasta la Cadena COPE cuando acabó la carrera. Empezó muy joven a presentar programas informativos matinales y de mediodía, siendo varios años jefe de informativos de COPE en Castilla-La Mancha. Con 33 años lleva 4 dirigiendo la Radio autonómica de CLM y presenta el programa de tarde «El Faro de CLM»:
«Ha sido un ascenso sin pensarlo, cumpliendo sueños por etapas, intenté no estar de paso en la Universidad, fue una experiencia transformadora, quería ser periodista y no sabía cómo se conseguía».
Guillermo aprendió a leer con un periódico y se acostaba de niño con la radio encendida, se crió con José María García, Antonio Herrero, Iñaki Gabilondo…:
«Escuchaba una radio muy artesanal y desde entonces sigo enamorado de ella, mi experiencia en COPE fue el bofetón que corroboró mi pasión por el periodismo, la sensación que produce la luz roja del directo nunca la olvidaré».
Considera que su etapa cubriendo información antiterrorista fue muy enriquecedora y que aprendió mucho a pie de calle. Cuando en 2009 le mandaron a Toledo comprendió que España, como dice él, no se acaba en la M-30:
«Me quité el periodismo de moqueta, fue un golpe de realidad, un reto personal».
Con 29 años empezó a dirigir RCM y no disimula que le temblaron las piernas ante esta misión:
«Dirigir un equipo de tantas personas es fantástico, en mes y medio creamos un nuevo modelo radiofónico lejos de la radiofórmula que se emitía hasta entonces y aunque la política tiene una incidencia mayor en un medio público (el 95% del presupuesto es de la Junta) la clave es la honestidad, se cuentan algunas noticias con cuidado porque influye quién pone el dinero, pero eso no implica que no se pueda hacer bien este trabajo».
Guillermo Vila denuncia un periodismo agresivo, combativo, «guerrillero» como él mismo lo califica, en el que el protagonista es el periodista y defiende una forma más equilibrada de hacer periodismo en el que se deje al oyente la última palabra:
«La radio tiene una magia que es la capacidad de de jugar sólo con el sonido, me gusta evolucionar, busco cambiar, y en eso me ayuda la capacidad para improvisar».