Aún se sorprende cuando se le pregunta por el galardón:
«Me he dedicado a hacer lo que tenía que hacer y se me premia por ello, la UFV ha sido para mí un lugar para reflexionar, un espacio para encontrarme y donde valorar a los demás por sus imperfecciones».
Miguel está terminando el Grado de Informática, ha conseguido hacer cuatro años de estudios en tres y espera seguir especializándose en Inteligencia Artificial, aún así, no pensaba que iba a ser seleccionado porque considera a sus compañeros aspirantes al Optimus alumnos excelentes:
«Pensaba de hecho continuar la carrera en la pública pero me sentí tan acogido en la UFV que hice un esfuerzo a nivel logístico para continuar aquí, es un lugar donde compartir inquietudes y cuyo planteamiento filosófico es único para poder participar activamente en la sociedad y hacer un mundo mejor».
Considera que el esfuerzo y la constancia han sido sus mejores aliados y que lo más importante es procurar ser felices:
«Yo lo intento preguntándome siempre, yendo más allá». El 8 de mayo es la entrega del premio en el acto solemne de fin de graduación.