Un sacerdote de los Legionarios que se encontraba de misión en Guinea, el Padre Miguel, junto a otros compañeros, propusieron a Reginaldo la idea de estudiar Relaciones Internacionales en España, dado que el sistema educativo es muy precario en su país:
«Las diferencias son muy grandes, Guinea es una sociedad primitiva en comparación con Occidente, aquí me he encontrado con unas personas que viven y hablan de modo muy diferente, pero me gusta mucho Madrid».
Tiene claro volver a su tierra cuando acabe la carrera:
«Guinea tiene una historia muy joven, queda mucho por hacer, mi idea es montar un negocio y buscar enchufes aquí que me ayuden a canalizar varios proyectos en beneficio de mi país».